
Somos muchos los que creemos que cada vez es más difícil llevar un estilo de vida saludable. Las largas jornadas laborales, las rutinas del hogar, la familia, los amigos y muchos otros aspectos más pueden limitar la práctica de buenos hábitos si no se tiene la información correcta.
Sin embargo, y gracias a Internet tenemos el poder de la información a nuestro alcance. Por ello, si te has planteado el objetivo de mejorar tus hábitos y conseguir un estilo de vida más saludable. Pero no sabes por dónde empezar, te recomiendo seguir los post de este blog.
Tener este blog como referencia te permitirá ser constante en tu determinación por alcanzar una mejor calidad de vida. La información que ofrece este blog, te ayudará a mejorar acorde a tus necesidades. Y juntos podremos superar todas las adversidades que nos propongamos.

Alimentación
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Desarrollo personal
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Productividad
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Productos y recursos
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Establecer hábitos saludables es el principio de un estilo de vida saludable.
En gran medida tus hábitos van a determinar cómo te vas a sentir tanto físicamente, emocionalmente como profesionalmente. Por lo que desde hoy mismo es necesario que comencemos a caminar en busca de tu estilo de vida saludable.
Debes entender que un estilo de vida saludable lo formarán todos aquellos hábitos de tu vida diaria que te ayuden a mantenerte más sano/a, más productivo/a y con menos limitaciones funcionales.
No podemos amortiguar todos los golpes de la vida, pero sí podemos cambiar nuestra reacción ante ellos. Sin embargo, y a pesar de que todos somos conscientes de esta realidad, no todos actuamos en consecuencia. Y nos dejamos llevar por una vida de la cual no nos sentimos satisfechos y deseamos cambiar. Verdaderamente, ¿qué nos impide cambiar?.
Nuestro estilo de vida, no es más, que el resultado de todas nuestras actitudes y comportamientos que adoptamos y desarrollamos para satisfacer nuestras necesidades como seres humanos.
Y dependiendo del estilo de vida que decidamos vivir vamos a tener unas repercusiones positivas o negativas en nuestra persona. Por ello es necesario abrirnos a nuestro mundo actual y ver que actitud positiva podemos introducir en nuestros hábitos diarios.
Nuestra salud emocional para un estilo de vida saludable.
El estrés es uno de los grandes males de nuestro tiempo. Y para controlarlo es necesario que mejoremos algunos aspectos básicos de nuestra salud emocional y física. Conviene que prescindamos de sustancias estimulantes, como el café o la cafeína. Que introduzcamos en nuestra vida ejercicio físico, que durmamos mejor, que disfrutemos de nuestros hobbies, respiremos de forma sosegada y nos alimentemos bien. Reduciendo el consumo de grasas, azúcar y sal.
Está demostrado que las personas con mayor actividad intelectual están mejor protegidas contra el deterioro del cerebro. Por ello es recomendable que evitemos rutinas y actividades pasivas como ver la televisión. Tener aficiones como la jardinería, el bricolaje, la pintura, la música, leer y escribir nos ayudarán a retrasar nuestro envejecimiento neuronal.
Nuestras funciones vitales para un estilo de vida saludable.
El sueño tiene una función vital en nuestro organismo, dormir lo suficiente y con un sueño de buena calidad es esencial para que llevemos una vida saludable. Hacerlo poco o mal influye negativamente en nosotros. Pues aumenta el riesgo de padecer algunas enfermedades cardíovasculares, infecciosas, metabólicas y nos pueden ocasionar fatiga, somnolencia, problemas de memoria y depresión.
Asimismo, es vital que ayudemos a nuestro organismo a recuperar el agua que pierde a través de la orina, el sudor o el aliento. Debemos beber unos dos litros diarios y consumir alimentos ricos en agua, como frutas y verduras.
Nuestras funciones psicomotoras para un estilo de vida saludable.
Del mismo modo unos malos hábitos alimentarios, la ausencia de ejercicio físico y el estrés pueden aumentar las posibilidades de que suframos dolores de espalda. Algo tan común entre la población y que además causa tantísimas bajas laborales. No hay mejor prevención para ello que mantener alto nuestro tono vital, tanto físico como psicosocial. Estar físicamente activo/a, alejado/a del sedentarismo y del sobrepeso es importante para potenciar nuestra musculatura y flexibilidad. Tan solo 10 minutos diarios de ejercicio bastan para prevenir dolores de espalda, siempre y cuando estos no se hagan de forma abusiva o causen molestias.
La introducción de la practica de ejercicio físico en nuestras vidas, no solo va a ser positivo para evitar dolores de espalda. La practica de ejercicio físico es el mejor aliado que podemos tener para mantener un peso equilibrado. Y en consecuencia evitar cualquier capitulo de obesidad, que nos impida mantener un vida activa y sana.
El sobrepeso tiene una relación directa con los problemas cardíacos, la fatiga crónica y muchas otras enfermedades. Por ello, lo mejor es mantener los kilos bajo control de manera equilibrada.